Los líderes en el antiguo Israel eran ungidos, es decir, consagrados echándole aceite por encima por la cabeza. Tanto los reyes como los sumo sacerdotes eran ungidos antes de comenzar sus respectivos ministerios. Saúl, un hombre joven de la tribu de Benjamín, fue consagrado como el primer rey de Israel. Además, intentó ser profeta y hasta sacerdote. Tristemente, fracasó en todas esas empresas. En contraste, Jesús de Nazaret, el mesías tan esperado por Israel, cumplió con su "triple oficio", dando su vida para cumplir la misión que Dios le encomendó. Instrucciones: Dele "Like/Me Gusta" a este episodio y compártalo en sus redes sociales. Suscríbase a este podcast. Suscríbase a este canal de YouTube, donde podrá ver y escuchar centenares de sermones y conferencias. No olvide oprimir la campanita para recibir las notificaciones inmediatamente. 3. Visite https://www.drpablojimenez.com 4. Siga al Dr. Pablo A Jimenez Rojas en Facebook, Instagram y Twitter (drpablojimenez en todas las plataformas) 5. Compre los libros del Dr. Jiménez por medio de su tienda cibernética: AMAZON. 6. Y de su página en Shopify: SHOPIFY.